Hoy nos levantábamos con una notícia escalofriante. En la noche de ayer 10 encapuchados entraban a la sede de Red Bull en Milton Keynes y robaban cerca de 60 trofeos logrados por la escudería. Al parecer, los asaltantes estrellaron un coche contra la sede para poder acceder a la zona de los trofeos y desmantelaron la vitrina en pocos instantes.
El equipo Red Bull ha reaccionado con inmediatez emitiendo un comunicado. "Nos sentimos conmocionados" -explicaba Christian Horner-, "los ladrones estrellaron un vehículo contra la entrada de la sede de Milton Keynes, robando más de 60 trofeos."
"El robo supone mucho daño y afecta a nuestros empleados nocturnos, que estaban trabajando cuando sucedió el robo, los ladrones, aparte de llevarse cosas que aunque no les pertenecían, representaban los éxitos de un grupo dedicado con gran esfuerzo individual"
De acuerdo con las declaraciones de Horner, los trofeos robados no eran más que réplicas de los originales que se utilizaban para mostrarlos a todos los aficionados y curiosos que hasta allí se acercaron, por lo que no entiende este robo ya que los delincuentes no podrán obtener grandes beneficios.
Tal y como informa Mundo Deportivo, Christian Horner lamenta los hechos acontecidos y advierte de mayores medidas de seguridad en un futuro para los aficionados que visiten Milton Keynes con la finalidad de que sucesos como el de la pasada noche no vuelvan a ocurrir.
Sin duda alguna este suceso ha conmocionado al mundo del motor en general, ya que gran parte de la historia más reciente de la F1 ha sido saqueada. Bajo el punto de vista de un servidor, estos acontecimientos no son más que propios de vándalos que ensucian el deporte y echan por tierra toda la labor tanto humana como deportiva realizada por un equipo, en este caso Red Bull. Así pues, apoyar a la escudería en todas las medidas que adopten para que estos desagradables sucesos no vuelvan a ocurrir.
Por Óscar Bisbal Viñuelas @RespirasMotor
No hay comentarios:
Publicar un comentario